After Life

El episidio continúa desde el final de Bargaining, con la scooby camino a casa preguntándose dónde habrá ido a parar Buffy después de salir huyendo.

Dawn ha llevado a Buffy a su casa, evidentemente. La cazadora está un poco despista todavía, y todos los cambios que ha sufrido su casa desde entonces no le ayudan demasiado, los muebles han sido cambiados de sitio y Willow y Tara se han apropiado de la habitació de Joyce (que tenía la cama más grande).

Spike entra en la casa buscando a Dawn y se queda sin habla cuando ve a Buffy. Reconoce las marcas de sus manos como las de alguien que ha tenido que escarbar para salir de su tumba. Cuando Buffy le pregunta cúanto tiempo ha estado muerta, él le contesta "147 días". En eso llegan los cuatro jinetes del apocalipsis y Spike huye.

Buffy no se siente capaz de responder ninguna de sus preguntas y se va a la cama. Anya y Xander se van también. Cuando salen, Spike arrastra a Xander contra un árbol y le pregunta muy enfadado por qué nadie le había contado sus planes. Después de unos cuantos gritos, le suelta y se marcha cabreado, advirtiendole que la magia siempre tiene consecuencias.

Mientras, en la habitación, Willow le dice a Tara que Giles volverá tan pronto como pueda. Giles parecía algo conmocionado, pero contento. Willow está preocupada porque Buffy no le ha dadolas gracias, no sabe si ha heco lo correcto. Tara intenta tranquilizarla acurrucándose en su hombro, y le susurra que tenga paciencia.

Más tarde, mientras duermen, un demonio con la cara de Buffy las despierta tirando diferentes cosas contra la pared. El demonio desaparece, y con él todos los objetos rotos, como si no hubiera pasado nada. La pareja va corriendo a comprobar que Buffy está en su cama profundamente dormida.

Willow llama a Xander para comprobar que todo está bien, mientras habla con ella Anya se le vanta de la cama y con un cuchillo empieza a hacerse cortes en la car, hasta que cae al suelo desmayada y las heridas desaparecen.

A la mañana siguiente todos discuten sobre lo que ha pasado. Buffy admite que mientras miraba fotos de sus amigos, estas cambiaron y sus caras aparecieron como cadáveres. La siguiente en ser endemoniada es Dawn, quien provoca un pequeño incendio dentro de la tienda de magia.

Buffy sale a patrullar y acaba en la cripta de Spike. Lo encuentra pegándose con una pared, como si así pudiera batir su angustia. Spike le pide disculpas a Buffy por no haber podido salvarla y le dice que desde entonces, todas las noches sueña con que llega a tiempo a salvarla.

El demonio que les está atacando es Tomogenisus. Es un demonio que surge como castigo por resucitar a los muertos. La unica manera de hacerlo desaparecer es retroceder en el tiempo, lo que significaría que Buffy nunca fue resucitada. Dawn se niega, y Willow la tranquiliza diciendo que el demonio acabará marchándose porque no puede vivir a menos que acabe con el objetivo original del hechizo: Buffy. El demonio, que estaba en el cuerpo de Xander, les da las gracias y se va en su busca.

Buffy vuelve a casa exhausta y es atacada por una energía demoníaca, afortunadamente nuestras chicas hacen un conjuro para darle una forma que Buffy pueda matar.

A la mañana siguiente, Buffy intenta comportarse de un modo más normal con su hermana, quien le asegura que todo lo que quiere es verla feliz. En la tienda de magia les dice a todos que se encontraba en el infierno y les agradece haberla traído de vuelta. Todos se abrazan emotivamente.

un poco más tarde, sale de la tienda buscando un poco de tranquilidad. Se encuentra con Spike, quien se sorprende de no verla tan feliz como al resto. Se ofrece a darle lo que quiera para ayudar. Buffy sólo quiere desahogarse y le confiensa al vampiro que mientras estaba muerta era feliz, se sentía completa. Dice que se siente como si la hubieran arrancado de esa paz violentamente y la hubieran enviado al infierno. Ahora todo es muy duro. Antes de marcharse, le dice en un tono serio que los demás jamás deberán enterarse.

Buffy Web Argentina