All the Way

Este es el capítulo que corresponde a Halloween.

Comienza en la tienda de magia, algunos clientes están disfrazados y hay muchos niños alrededor. Xander lleva un traje de pirata y Anya un disfraz de no se qué con patines. La tienda esta llena de gente y toda la scoobie está trabajando. Cuando por fin llega el cierre todos están destrozados, excepto Anya que cuenta entusiasmada todo el dinero que han conseguido. Mientras lo hace, inicia un pequeño baile con Dawn. Xander la mira anonadado y susurra : "voy a casarme con esa mujer".

Se levanta, se acerca a Anya y juntos anuncian su compromiso. Tara y Dawn se lo toman realmente bien, pero el resto se queda algo noqueado por la noticia. Buffy decide improvisar una fiesta en su casa, no han tenido tiempo de preparar nada, así que todo lo que tienen son bebidas y unas patatas. Willow hace un hechizo y decora la sala de estar ante las severas miradas de Tara y Giles.

A solas en la cocina, Tara saca el tema del hechizo. Willow se molesta con ella porque cree que le esta dando demasiada importancia a un pequeño incidente, y la discusión se corta a mitad cuando Dawn irrumpe en la cocina. La cosa no va a más, pero en las siguientes escenas podemos ver a Willow bailando, mientras Tara está sentada sola en el sofa.

Dawn informa a su hermana de que va a pasar la noche en casa de una amiga, pero en realidad, su amiga y ella han quedado en una cita doble con un par de chicos mayores. Los cuatro juntos se dedican a hacer las trastadas típicas de halloween, y Dawn es pillada por un viejo en una de estas. El hombre en lugar de molestarse les invita a entrar en su casa a tomar un refresco. Los jóvenes entran un poco desconfiados. Cuando el viejo le propone a Dawn que le ayude en la cocina, su pareja se levanta y se ofrece voluntario. Lo que creemos un gesto caballeroso no es otra cosa que la oportunidad perfecta para que el joven vampiro se alimente del anciano. Los cuatro dejan la casa, y no resulta dificil adivinar que el otro chico también es un demonio.

La madre de la amiga de Dawn llama a su casa para preguntar por su hija, y Giles le informa de que Dawn iba a quedarse en casa de la otra a pasar la noche. Después de este malentendido, Giles detiene la fiesta y manda a Tara y a Willow a buscar a Dawn. Xander y Anya se quedan esperando y Giles va a buscar a Spike. Buffy se encuentra fuera patrullando.

Buffy descubre al anciano mordido en el cuello y va a avisar a Spike, quien de paso le informa de lo sucedido con su hermana.

Dawn no sospecha el revuelo que se está montando por su culpa y disfruta de su primer beso en un claro del bosque, dentro del coche.

Willow decide empezar a buscar por el Bronze, pero está abarrotado. La bruja comienza un hechizo que enviará a todo aquel que no sea una chica de quince años a una dimensión paralela por una fracción de segundo. Tara la detiene horrorizada. Willow detiene la música (sólo para ellas) y le pide explicaciones. La rubia le dice que está usando demasiada magia últimamente y que no puede mantenerse al margen calladita, a lo que su novia responde que estaría muy bien. "Maldita sea, si no te quisiera tanto lo haría!!", responde antes de salir corriendo.

Dawn se da cuenta de su chico es un vampiro y sale del coche corriendo. Giles ha llegado al claro y ha conseguido alejar al vampiro de la amiga. Spike y Buffy también están allí, y en lugar de pelear empieza a echarle la bronca a su hermana por haberle mentido y haberse escapado con un vampiro.

No tardan demasiado en empezar a pelear. Dawn acaba en el suelo con el chico, quien le dice que realmente le gustaba. Ella dice que siente lo mismo y poco después le clava una estaca en el pecho.

Una vez en casa, Tara dice que está cansada y se sube a la habitación. Willow la persigue por las escaleras, dejando a Giles con Buffy. La mayor de las Summers deja que sea Giles quien castigue a Dawn y se marcha pidiéndole que no sea muy duro con ella.

En la habitación, Willow le pide disculpas a Tara, pero esta le dice que no es tan fácil y que está muy cansada para discutir. Willow dice "Bien, olvídalo", y formula un pequeño hechizo. Cuando se acuesta, Tara se acurruca a su lado y le dice que así es como deberían acabar todos los días, y empezar, y todo lo del medio... Willow le pregunta si está enfadada y Tara contesta "por qué".

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