Villians
Una ambulancia se acerca a casa de Buffy, se supone que a gran velocidad y con las luces y la sirena puesta, aunque el conductor parece muy tranquilo. Viviendo en Sunnydale, me pregunto cuantas veces habrá podido llegar a tiempo de salvar una vida...
Xander les recibe en la calle de detrás de la casa y les indica corriendo dónde se encuentra Buffy y cómo a sucedido todo. Ingenuamente, el enfermero le pregunta si ha sido un accidente, pero Xander le contesta que alguien ha intentado matar a su amiga. Los chicos se ponen rápidamente manos a la obra, apartando a Xander de su camino para que no moleste. Intentan limpiar la herida, pero el pulso de Buffy es muy débil y hay que llevarla al hospital deprisa.
En la casa, Willow abraza el cuerpo de Tara contra su regazo con fuerza, llorando y rogándole que se levante. Tara permanece inmóvil. La habitación oscurece, y en el techo empieza a formarse una nube gris, cada vez más espesa. Los ojos de Willow son completamente negros, excepto por la sombra rosada que han dejado las lágrimas. La respiración de Willow es entrecortada, reprimiendo los sollozos, y su voz parece temblar mientras pronuncia: "Osiris, yo te lo ordeno, tráela de vuelta!"
En la nube aparece el rostro de lo que parece un demonio, aunque en realidad es Osiris, el dios egipcio de la muerte. El dios le reprocha que intente involucrarlo en lo ocurrido con una voz profunda. "Por favor. Por favor... tráela de vuelta", pronuncia Willow entre sollozos y con la voz espesa por las lágrimas. Osiris no le deja intervenir en la muerte por causas naturales. "¿Cómo es esto natural?", responde Willow con la voz rota y mirando el cuerpo que tiene abrazado. "Es una muerte humana, por causas humanas." Willow intenta rebatirlo, seguramente pensando en Buffy, pero Osiris le contesta que ella revivió lo que le había sido arrebatado por causas místicas. Esto no es lo mismo, Tara ha seguido las causas naturales, y ya está hecho. "No, tiene que haber una manera", dice Will sin dejar de llorar. "¡¡Está hecho!!" responde el rostro del dios enfurecido. Willow no lo acepta y grita "no", de su boca aparece un rastro de energía y el dios desaparece con un gesto de dolor. (eso, o Willow se ha comido a Osiris)
Los enfermeros llevan a Buffy en una camilla hasta la ambulancia, seguidos por Xander. Willow sale de la casa, con la camiseta y los hombros todavía manchados de sangre, su cara es completamente inexpresiva al ver a Buffy en la camilla. Xander la ve salir y le pregunta si está bien. Ningún comentario sobre Tara, ni sobre la sangre de su camiseta. "¿Cómo ha pasado?", pregunta Willow. Su voz es tan fría como su expresión. Xander le dice que Warren ha aparecido con un arma, y la pelirroja se marcha en dirección contraria a la ambulancia. Xander la mira alejarse sin saber qué hacer hasta que uno de los enfermeros le llama la atención y le dice que tienen que ir al hospital.
En una escena innecesaria, vemos a Jonathan y Andrew en una celda. Jonathan está preocupado porque un de los chicos que andan por allí le está mirando raro, y Andrew sólo espera que su tía vaya a sacarlos pronto. Jonathan se vuelve, y de forma fría le contesta que la han cagado, que su tía no va a sacarle de ahí y tampoco lo va a hacer Warren. Jonathan empieza a hablarle de cómo ellos se volvieron contra él, pero Andrew lo niega. El rubio sigue con la esperanza de que Warren aparecerá en cuanto consiga un plan para sacarlos de allí.
Warren camina tranquilamente y entra a un bar de demonios, vampiros, etc... e invita a una ronda, diciendo que ha matado a la cazadora. Un par de demonios le preguntan como lo ha hecho. Él les cuenta que exploró todas las artes oscuras y otras mágicas, pero que al final necesito de un simple arma. El vampiro y el barman empiezan a reír, pero no con Warren, de Warren. Parece que ambos han oído en las noticias que una chica fue disparada en la parte trasera de su casa, pero sobrevivió y está en el hospital. Le dicen, que en cuanto se recupere, estará muy cabreada y querrá venganza. Warren les mira preocupado.
Willow entra en la tienda de magia, al abrir la puerta las bombillas de las lámparas explotan y Anya la mira con tristeza. Pero la pelirroja ignora cualquier rastro de preocupación en ella y le pregunta directamente por los libros de magia negra. Anya intenta explicarle que sabe lo que ha pasado y no necesita de esos libros para solucionarlo, ella puede ayudarla... pero Willow la detiene con un pequeño hechizo que le impide hablar o moverse.
Con una mirada, los libros de las estanterías del piso de arriba vuelan hacia la mesa redonda. Un par de ellos caen abiertos y Willow extiende sus manos sobre la página, las palabras empiezan a desaparecer de la página y a subir por sus manos. Letras y símbolos rojos recorren todo su cuerpo desde sus dedos hasta su frente, desde donde tiñen el pelo y los ojos de la bruja de un negro profundo. Uno de los símbolos que más llaman la atención (sobre todo por su tamaño respecto al resto), es el pentágono invertido que cruza lentamente su pecho, es el símbolo del mal y el demonio. Esta ya no es nuestra Willow.
Cuando Dawn llega a casa, todavía de día, se encuentra con la puerta completamente abierta, así que entra algo asustada preguntando por Buffy. Cuando abajo no le responde, sube corriendo las escaleras y busca por el piso de arriba, la puerta de la habitación de Willow está abierta, así que Dawn se asoma diciendo que la puerta de la calle también lo estaba. Pero la frase se queda incompleta cuando detrás de la cama ve el cuerpo inmóvil de Tara, su cara se contrae como si le hubieran quitado el oxigeno y la escena desaparece con un fundido a blanco, como si fuera un mal sueño.
Warren se ha quedado muy asustado después de lo del bar y va a ver a Rack, pensando que quizás el hechicero pueda ayudarle a cambio de dinero. Warren le dice que ha intentado hacerles un favor a todos librándoles de la cazavampiros, pero ha fallado y ahora esta le perseguirá, necesita protección. Rack dice que la cazadora era demasiado para un niño, y además, ese es el menor de sus problemas, debería preocuparse por la bruja. Warren no sabe a que se refiere. "Willow", dice Rack, "es un nuevo poder, cualquiera con intuición puede sentirlo. Va a destrozar la ciudad... empezando por ti". Warren se defiende diciendo que a ella no le ha hecho nada para que esté tan enfadada, vale que haya disparado a su amiga, pero está en el hospital y se va a poner bien. Rack le dice que percibe muerte, no la de la cazadora, pero alguien a muerto y es la razón por la que Willow quiere su cabeza. "Ahora mismo puede sentir tu esencia, amigo. Es cuestión de tiempo que te encuentre". Warren intenta presionarle para que le ayude, necesita algo para defenderse y algo con que poderla atacar. Rack coge su dinero, pero no le da esperanza. Warren no tiene poder, lo único que puede hacer es ver su futuro a veces cuando duerme, pero eso no es suficiente.
En el hospital, Xander observa por un cristal como un grupo de doctores intenta extraer la bala de Buffy, quien está tumbada, inconsciente, en una mesa de operaciones. La luz empieza a fallar, y se quedan a oscuras. La máquina que controla el corazón de la cazadora aumenta la velocidad del pitido. Willow aparece en la habitación y les ordena que se vayan. Al principio se quedan inmóviles, mirando a la recién llegada, pero a una segunda orden, todo el equipo abandona la sala, dejando solas a las chicas y a Xander que entra corriendo al verla. El pitido de la máquina es ahora más agudo y constante... el corazón de Buffy ha dejado de latir.
Xander intenta avisarla de que Buffy está apunto de morir. "No, no lo está", dice Willow. Está vestida de negro, no sabemos cuando se ha cambiado, pero ya no tiene sangre. Willow observa a Buffy y la bala sale de su pecho lentamente, flotando en el aire sobre ella hasta que Willow eleva la mano y la atrapa. "Es tan pequeña", dice al sostenerla.
Buffy comienza a despertarse lentamente, Xander corre a abrazarla diciendo que tiene que dejar de morirse. Willow los mira sin moverse, sus ojos vuelven a ser verdes y el contraste de estos con el pelo negro le dan un aspecto aterrador. Buffy la mira confundida, preguntándole que ha pasado, sabe que ha pasado algo malo. Willow le dice que ya se lo explicará, ahora es hora de encontrar a Warren.
Warren está en la estación de autobús, buscando un billete que le aleje de Sunnydale lo más rápido posible.
Xander conduce por una carretera en medio del desierto, llevando a las dos chicas con él. Willow quiere ir más rápido, pero Xander se niega, así que Willow presiona el acelerador con algo de magia y el coche aumenta la velocidad. Xander se cabrea, y Buffy le dice que tienen que parar, esto no le gusta. Le promete que atraparán a Warren y lo meterán en la cárcel, pero Willow no debería estar usando magia. "Si no la estuviera usando estarías muerta", se justifica Willow. Pero Buffy le dice que no está bien, no es eso lo que ella quería. " A veces no tenemos elección", dice Willow. Los dos amigos intentan convencerla de que no es una buena idea, les prometió dejar de usarla... (nadie le pregunta por Tara, o por qué ha vuelto a la magia) Pero Willow no les escucha, está concentrada en otra cosa y hace girar el coche, saliendo de la carretera y a travesando por mitad del desierto.
El coche se detiene en el arcén de otra carretera, Willow sale de él y se queda parada en mitad de ella esperando a un autobús que viene de frente. Willow detiene a sus amigos con un hechizo, antes de que puedan hacer nada para detenerla, con otro hechizo fuerza al autobús a cercarse más rápido y lo detiene violentamente a unos pocos centímetros de su cuerpo. Abre las puertas y grita "Sal!"
Warren, se levanta de su asiento y camina asustado hacia la bruja, quien apenas se espera que esté abajo para agarrarlo por el cuello. Él intenta explicarse y pedir disculpas, pero apenas una palabra sale de su boca antes de que Willow apriete su mano sobre el cuello. Uno de los ojos le revienta, cayendo al suelo y rebotando, dejando en su rostro un pequeño orificio por el que se pueden ver los cables y circuitos del robot.
Xander y Buffy corren hacia Willow, quien comenta frustrada como Warren la ha engañado. Willow intenta alejarse, dispuesta a buscar otra manera de encontrarle, pero su amiga la detiene preguntándole qué va a hacer cuando lo haga. "Vamos a matarle", contesta ella fríamente. "Ok, tienes que calmarte", dice Buffy. La bruja la mira sin creer lo que oye, su amiga le intenta explicar que ella también está enfadada, no hay excusa para lo que Warren hizo, pero...
"Disparó a Tara." Dice Willow en un susurro frío. Buffy y Xander la miran aterrados. "Cuando te disparó a ti, también le dio a ella. Arriba, en mi habitación." Buffy ha perdido toda argumentación, y Xander es él único capaz de preguntar si está muerta. "Esta muerta. Y ahora él también esta muerto". Buffy siguen sin saber qué decir. Xander le pregunta porqué no se lo había contado antes, "he estado ocupada", dice ella.
Willow intenta marcharse, pero Buffy la detiene de nuevo diciendo que la quieren, y también a Tara, pero matar humanos no es la manera de hacer las cosas. "¿Cómo puedes decir eso? Tara está muerta!", dice Willow. "Lo sé. Y no puedo entender... nada. Ni lo que ha pasado, ni por lo que estás pasando tú. Willow si le haces eso a Warren te destruirás a ti también". Xander le intenta hacer ver también que la magia es demasiado fuerte y no hay vuelta atrás. "No voy a volver atrás!", dice Willow mientras se aleja, impidiéndoles que la sigan con el mismo hechizo de antes. Sus dos mejores amigos no han podido detenerla, quizás no querían hacerlo porque ninguno de los dos ha usado la carta de "¿Qué pensaría Tara de todo esto?" (sinceramente, es mucho más consistente que el "matar humanos está mal")
Cuando Buffy y Xander regresan a casa, se encuentran con que la puerta continua abierta (afortunadamente en Sunnydale hay vampiros, monstruos y bocas del infierno, pero no ladrones). Ambos se preguntan por qué Dawn todavía no ha vuelto, y van a buscarla por la casa. Buffy hace el mismo recorrido que hizo su hermana al llegar y acaba en la habitación de Willow, quedándose inmóvil al ver el cadáver de Tara en el suelo.
"No quería dejarla sola", dice una voz temblorosa desde el suelo. Al volverse, Buffy ve a su hermana, acurrucada contra la pared frente a Tara, con los ojos hinchados y todavía llorando. "Dawn, cariño, tienes que salir de aquí." Pero Dawn no se mueve, no puede apartar los ojos de Tara. "Dawn, se fuerte por mí, ok?". Todavía mirando al cuerpo inmóvil del suelo y con la voz completamente rota por el llanto, Dawn se deja abrazar por su hermana mientras dice: "No lo entiendo". Xander las mira desde la puerta.
Dos hombres sacan el cuerpo de Tara dentro de un saco negro, Xander se está haciendo cargo de todo, Buffy está pendiente de lo que ocurre, y Dawn mira hacia otro lado supongo que no queriendo tener esa ultima imagen de Tara en su mente. Cuando sólo quedan ellos tres en la casa, Buffy les dice que tienen que encontrar a Willow, porque si ella encuentra a Warren, es hombre muerto. "Bien", dice Dawn recuperando toda la fuerza de su voz. Buffy intenta hacerle ver que eso está mal, pero es demasiado para Dawn. Warren ha matado a Tara, y ha intentado lo mismo con Buffy, "lo haría yo misma si pudiera", dice la pequeña.
"Ser la cazadora no me da licencia para matar. Warren es humano", "¿¿Y??", pregunta Dawn enfadada. "El mundo humano tiene sus propias leyes para tratar con la gente que yo no puedo" No pueden controlar el universo, si pudiera la magia no cambiaría a Willow como lo hace, y serían capaz de traer a Tara de vuelta. "Y a mamá.." dice Dawn. Buffy les promete dar a Warren lo que se merece, pero no dejará que Willow se destruya a si misma. Dawn quiere ayudar, es Willow. Y Buffy está de acuerdo, peor la dejará ayudar cuando no sea tan peligroso, de momento tiene que mantenerse a salvo. Dawn les dice que quiere ir con Spike, se siente a salvo con él. Buffy acepta, pero Xander se niega, ambos se van a hablar fuera donde ella no pueda oírles. Xander no comprende como es que Buffy va a dejar a su hermana con la misma persona que intentó violarla hace un par de noche.Buffy le dice que Spike no puede hacerle daño aunque quisiera, y que nuca lo haría.
En la habitación de Tara, Willow está sentada, mirando la camiseta manchada con la sangre de Tara. La bruja extiende la camisa en el suelo, y comienza un hechizo que le diga donde encontrar al asesino de Tara, la sangre empieza a formar un mapa de Sunnydale y una pequeña luz le indica dónde encontrar a Warren.
Buffy y Dawn entran en la tumba de Spike dándole un susto de muerte a Clem, quien dice que Spike se ha marchado de la ciudad y que él está cuidando su cripta por él. Clem no sabe donde está Spike, pero le dice a la cazadora que puede que se haya ido por mucho tiempo. Buffy le pide a Clem que vigile a Dawn. Dawn al principio se niega, pero Clem acepta amigablemente. Clem le promete alquilar una peli y jugar al parchís, y Dawn acepta quedarse. Buffy la abraza y le promete volver lo antes posible.
Caminando por una tribu de la zona africana, Spike se encuentra con una nativo que le da una especie de aviso que no entiende. Más tarde, en una cueva, Spike mira las pinturas de las paredes y camina por la oscuridad, cuando un demonio con brillantes ojos verdes aparece. El demonio sabe quién es y qué está buscando, también sabe que todo tiene que ver con una mujer… la cazadora. Spike le dice que es todo culpa del chip, que quiere volver a su antiguo ser. "Mira en lo que te ha convertido. Eras un guerrero legendario y has dejado que te castren" Spike le repite que es culpa del chip. Spike le dice que puede con cualquier prueba que le ponga. "La zorra va a ver el cambio"
Xander ayuda a Anya a moverse, lleva una seis horas paralizada por el hechizo, y casi no puede andar. En cuanto que recupera algo de sus fuerzas, se aleja de Xander y se sienta en una silla. Anya le dice que Willow estuvo allí y que fue directamente a por los libros de magia negra. No hace falta que Xander le explique lo que ha pasado, ella lo sabe: es Tara. Xander no le pregunta cómo lo sabe, no parece sorprenderle en absoluto. Si le sorprende, sin embargo, que le diga que no necesita un hechizo para encontrar a Willow. Anya puede hacerlo, puede sentir su necesidad de venganza. "¿Cuándo?", pregunta él comprendiendo que Anya vuelve a ser demonio. "¿Cuándo crees tú?", le contesta Anya con una mueca de dolor.
Buffy entra corriendo en la tienda y rápidamente, es puesta al día de la reactivación de Anya como demonio. Anya está a la defensiva ante la mirada acusadora de los otros dos, y dice que hubiera ayudado a Willow, es su trabajo, pero ella no quería ayuda, quería hacerlo sola. Aún así, Anya se decide a ponerse de parte de la Scooby (si es que queda algo de ella), sólo por Willow.
Willow persigue a Warren por el bosque, camina calmada sin mirar el camino, como si supiera a donde va por instinto. Lleva la camiseta con el mapa de sangre en la mano. Warren corre y se oculta de ella entre los árboles. "Corre toda la noche, Warren. Aún así voy a encon...", Willow no termina la frase, Warren le ha clavado un hacha en la espalda. Un golpe seco que deja a la bruja tumbada boca abajo en el suelo. Pero solo por un momento, el cuerpo de Willow se incorpora sin esfuerzo, y ella misma se quita el hacha de la espalda y la lanza a los pies de él. Warren vuelve a correr.
Warren tiene un par de juguetes preparados para Willow. Saca una caja de metal con alas (literalmente) y la envía volando hacia ella, cuando la caja está lo suficientemente cerca, explota. Willow con un hechizo rápido convierte el fuego en agua en un impresionante y carísimo efecto especial, aunque completamente innecesario en la historia.
Willow aparece frente a Warren, deteniendo su carrera. "Escucha. Fue un accidente" dice él. "Oh, en lugar de matar a mi mejor amiga, has matado a mi novia". Warren le dice que no era nada personal, mientras corre hacia atrás sin dejar de mirar a Willow. "Bueno, esto sí", responde Willow. La bruja le lanza rayos mágicos que lo derriban a mitad de carrera, y él le lanza otro de sus trucos. Nada con el suficiente poder de detenerla.
Cansada de juegos, Willow atrapa a Warren haciendo que un grupo de ramas se le enreden entre los pies y las manos. Warren está sujetado por ellas, su cuerpo como crucificado. Willow se le acerca lentamente. Warren está tan asustado que prueba incluso a amenazarla, diciendo que cuando escape, se las arreglará para que se una a su novia. Willow le ignora, pero presiente lo que paso con Katrina y la hace aparecer de detrás de un árbol. Warren mira la figura de su exnovia horrorizado y aparta la cabeza repitiendo que solo es un truco.
"Por qué Warren? Podías haberme dejado marchar?... cómo pudiste decir que me amabas y hacerme eso" Warren fuera de si, vuelve la cabeza hacia Katrina y le grita "Porque te lo merecías, zorra!!". Pero la imagen ha desaparecido. Desafortunadamente para él, Willow sigue en frente.
Willow extiende la mano y deja ver la bala que extrajo de Buffy. En un movimiento rápido, arranca los botones de la camisa del chico y éste empieza a ponerse muy nervioso y ha repetirle que lo siente una y otra vez. Willow deja la baja suspendida en el aire y le pregunta si quiere saber lo que se siente al ser disparado, un disparo de verdad... no es como en los comics, y Willow cree que él necesita comprobarlo para entenderlo, así que hace que la bala se introduzca lentamente entre una selva tropical de torso peludo.
Warren deja escapar un gemido agudo, mientras Willow le describe como la bala empieza haciendo un pequeño agujero en su pecho, para luego introducirse en su sistema y arañarle como con garras por dentro. Warren grita con fuerza, y Willow harta de oír sus quejidos sin sentido, le cose la boca, literalmente, con un hechizo. Los ojos de Willow son verdes, terriblemente humanos, probablemente lo único humano que quede en ella en este momento. El dolor de Warren debe ser insoportable, incapaz de moverse mientras la bala recorre su camino rápidamente, Willow estás disfrutando de su venganza.
"La muerte... la muerte parece que dura para siempre", dice Willow, sin mirarle, y con una expresión de dolor en los ojos tan aguda que te parece estar viendo la misma imagen de Tara muerta entre sus brazos, que ella debe estar reviviendo en ese momento. La muerte es eterna, porque no hay vuelta atrás, y ella está muerta sin Tara, aunque no pueda dejar de respirar. "Un trozo de metal tan pequeño ... lo destruye todo." Dice Willow, inconsciente del dolor que Warren está sufriendo, mientras intenta explicar con palabras lo que siente. "Ha alejado su luz de mí... de nuestro mundo. Y ahora, la única persona que debería estar aquí, se ha ido, y una basura como tu sigue viviendo". Willow le dirige la mirada de nuevo, preguntándole si puede sentir la bala. Warren no puede contestar, tiene la boca cosida, pero Willow se lo vuelve a preguntar igual.
Con un gesto, Willow deshace el hechizo y Warren grita, le pide ayuda. Le dice que no es lo que quiere, ella no es mala, no como él. Buffy, Anya y Xander se acercan a ellos, han seguido las indicaciones de Anya desde la tienda de magia y finalmente les han encontrado. Warren sigue diciéndole cualquier cosa que consiga distraerla, le dice que sus amigos la llaman, que sabe que está sufriendo... Willow le mira como si no entendiera nada, y dice "Bored now.. " (me aburro), la misma frase que repetía Vamp Willow en el universo paralelo. Con otro gesto, frío y muy tranquilo, la piel de Warren desaparece por su cabeza, como si se quitara la camiseta, y suspendido de las ramas queda un amasijo de músculos y sangre sin vida.
Buffy y los otros se detienen en seco, sin creer lo que ven sus ojos. "¿Qué has hecho, Willow?", le pregunta Buffy. Willow no se vuelve, el cuerpo frente a ella empieza a arder hasta que desaparece por completo. "Uno menos...", dice la bruja antes de desaparecer entre una nueve de humo. Sus ojos son completamente negros.
Anya no parpadea, Xander mira a Buffy y la cazadora sigue con la mirada fija en el espacio vacío, donde momentos antes, Willow a matado a Warren...