Angel: Marca Kekfadlorem. Ah, no había visto uno antes.
Wesley: Un puñal de esa marca es la única forma de matar un demonio Kek. Puede ser útil.
Angel: Si los Kek no estuvieran extinguidos.
Wesley: ¿Lo están? Oh, cielos. Bueno, quizá haya alguno por ahí en hibernación. Puede despertar en cualquier momento y embarcarse en una cruzada sangrienta.
Angel: Cruzaré los dedos.
Angel: (sobre Cordelia) Está haciendo pasteles.
Wesley: ¿Lo que olía era eso? Creía que era algún rastro.
Ryan Anderson: Ha cogido una carta.
Stephanie Anderson: No lo he hecho.
Ryan Anderson: Si lo ha hecho. Tenía 5 y ahora solo tengo 4.
Paige Anderson: Pues hay niños en la India que solo tienen 3. Vamos, a la cama.
(¡Madres!)
Angel: He visto la muerte otras veces. Demasiadas. He perdido amigos, he matado a personas...
Cordelia: Y tú estas muerto. Lo siento.
Angel: (por Ryan) Es un diablillo, ¿eh?
Seth Anderson: (enciende un cigarrillo) ¿Le molesta?
Angel: No.
Seth Anderson: Hay mucho loco de la salud. ¡Como si fueran a vivir siempre!
Angel: No es recomendable.
Seth Anderson: Sabe una cosa, ¿creo que aun no nos ha dicho su nombre?
Angel: Angel. Jones. Angel Jones.
Cordelia: ¿Qué es esto que tenéis aquí? ¡Qué chulo!
Wesley: Es la secreción corporal de un Ethros. Un demonio.
Cordelia: ¿Por qué no has dicho que era... pis de demonio antes de que lo tocara?
Cordelia: ¿Cuál es el demonio?
Angel: Creo que es el padre, le tienen miedo.
Wesley: Un padre no tiene que estar poseído para aterrorizar a sus hijos. Solo tiene que...
Seth Anderson: ¿De que os reís?
Stephanie Anderson: Angel es gracioso.
Seth Anderson: ¿Sí? Lo disimula bien.
Paige Anderson: ¿Cuál es el secreto, Angel?
Angel: Utilizo chocolate. Por eso son marrones, y se llaman pasteles de... chocolate.
Paige Anderson: (a Angel) Creía que querías ayudarnos. No eres un ángel.
Angel: Son mis ayudantes.
Cordelia: Hola, soy Cordelia. Siento lo de la posesión y todo eso.
Cordelia: No sé si poner plásticos en el suelo... ¡Angel! ¿Sabes si habrá muchas vomitonas? Porque... vi la película.
Monja: ¿Cómo te atreves a entrar en un templo?
Angel: No soy lo que cree.
Monja: ¿No? (le acerca la cruz del rosario a la mano y él la aparta antes de que le toque)
Angel: De acuerdo. Si lo soy. Pero intento ayudar a alguien.
Angel: Wesley, no aguantas a los vendedores. ¿Cuántas enciclopedias tienes?
Wesley: Al comprar la Británica me dieron la de Historia.
Ryan Anderson: ¿Por qué crees que esta gente confía en tí más que los demás?
Angel: Yo le ofrecí quedarse.
Ryan Anderson: Eres más estúpido que él.
Wesley: Tu autem...
Ryan Anderson: Vamos, Wesley. Dile que es tonto por confiar.
Wesley: Effugare, diabole.
Ryan Anderson: Dile como planeas matarle.
Wesley: No es cierto.
Ryan Anderson: ¿No? Tiene más miedo de tí que de mí.
Wesley: Angel. Antes de continuar me gustaría asegurarte, ahora que ya hemos luchado codo con codo, que lo que el demonio dijo antes...
Angel: Sé que no planeas matarme, Wesley. Pero serías capaz. Eso es bueno.