Buffy: ¿Alguna vez has ido de intercambio?
Xander: Una vez mi padre intentó venderme a unos
armenios. ¿Eso cuenta?
Xander:
¡Sí, claro! El viejo truco de “déjame que te descifre esos grabados”. ¡Por
favor! ¿Sabes cuantas veces he hecho yo eso?
Xander: (pronunciando cada palabra despacio) Tu hablas muy bien nuestro idioma.
Ampata: Escucho mucho.
Xander:
Pues estupendo, porque yo hablo mucho.
Ampata: Tu también me gustas.
Xander: ¿En serio?
Ampata: En serio.
Xander: ¡Que bien! ¿De verdad?
Ampata: ¡Sí!
Xander:
¡Es fantástico! ¿No serás una mantis religiosa?
Ampata: Hola Xander.
Xander: Oh, aj, oj.
Buffy: Yo sé traducir a un americano al que se le cae la baba. Ha dicho que estás guapísima.
Xander:
Gracias.
Oz:
¿Quién será esa chica?
Xander: Tengo, mejorando lo presente, el peor gusto para las mujeres que pueda tener nadie en el mundo, jamás.
Buffy: Ampata no era mala. Al menos al principio. Yo creo que le gustabas mucho.
Xander: Si, pero todo ese asunto de chuparle la vida a la gente hubiera complicado nuestra relación.
