Angelus: Pasión. Está dentro de todos nosotros. Durmiendo. Esperando. Y aun sin desearlo, sin pedirlo, se desata. Abre sus fauces y aúlla.
Nos habla. Nos guía. La pasión nos gobierna a todos y nosotros obedecemos. ¡Qué remedio nos queda!
La pasión es la fuente de nuestros mejores momentos: la alegría de vivir, la claridad del odio y el éxtasis del dolor.
A veces duele más de lo que podemos soportar. Si pudiéramos vivir sin pasión, tal vez encontraríamos algo de paz, pero estaríamos vacíos. Habitaciones vacías, destartaladas y húmedas. Sin pasión, estaríamos realmente muertos.
Cordelia: ¡Un momento! Yo creía que los vampiros no podían entrar sino se les invitaba.
Giles: Si, pero si les invitas una vez, después ya pueden entrar.
Xander: Bueno, espero que hayáis aprendido la lección y no volváis a invitar a extraños a vuestro dormitorio.
Cordelia: ¡Dios mío! ¡Yo le invite a subirse a mi coche! Eso significa que pueda subirse a mi coche siempre que quiera.
Xander: Si, estas obligada a llevarle a él y a sus amigos vampiros siempre que les apetezca ¡y esos tipos nunca pagan la gasolina!
Xander: ¡Hola! Perdón ¿no sabéis que hay que llamar a la puerta?
Jonathan: Venimos a por unos libros. Sobre Stalin.
Xander: ¿Creéis que esto es una librería?
Giles: Es la biblioteca del instituto, Xander.
Xander: ¿Desde cuando?
Giles: Entonces, Angel ha decidido aumentar el acoso.
Cordelia: ¿Entrando a hurtadillas en su cuarto y dejándole cosas por las noches? ¿Por qué no la corta el cuello? ¿O la estrangula cuando esta dormida? ¿O le arranca el corazón? Bueno, solo estaba intentando ayudar.
Buffy: Giles, Angel me contó una vez que cuando estaba obsesionado con Drusilla lo primero que hizo fue matar a su familia.
Xander: Tu madre.
Buffy: Si, voy a tener que decirle algo. La verdad.
Giles: No, eso no puedes hacerlo.
Xander: Si, cuanta más gente sepa el secreto menos interés tendrá para nosotros.
Buffy: ¡Pero tengo que decirle algo, tengo que hacer algo! Giles, Angel puede entrar en casa cuando quiera y yo no siempre estoy con mi madre. No puedo protegerla.
Giles: Ya te he dicho que encontraré un hechizo.
Buffy: ¿Y que pasa hasta que le encuentre?
Cordelia: Hasta entonces tu madre y tu podéis dar una vuelta conmigo en mi coche.
Buffy: Lo siento Angel. He cambiado la cerradura.