Capítulo V
Llegaron a la cocina en pocos minutos, por el camino habían estado comentando las posibilidades y las razones por las que el vampiro había llegado a ellos, parecía cosa del destino que quizás, pensó Gwen, le intentaba dar otra oportunidad como premio por su heroico sacrificio.
Entraron en la cocina y se sentaron en la mesa para seguir desayunando, Gunn tenía cara de pocos amigos, miraba a Fred fríamente mientras la chica intentaba evitar esos ojos escrutadores e intimidatorios. Gunn conocía perfectamente a Fred, llevaban ya mucho tiempo juntos y parecía no haber secretos entre ellos pero era obvio que la chica ocultaba algo.
Angel aun no había bajado a desayunar su tazón de sangre de cerdo, esa noche había llegado más tarde de lo habitual así que intentaría dormir algo más esa mañana. Esto tranquilizó a las chicas que veían que su obligada charla se retrasaba de nuevo.
El ambiente era tenso, sólo existían miradas entre ellos, nadie se atrevía a romper el silencio hermético que se había apoderado de todos los allí presentes. Las chicas comían algo con la mirada gacha para no descubrirse ante Gunn.
Angel apareció pasados unos minutos, tenía mala cara, estaba claro que no había dormido mucho esa noche. Tenía el ceño fruncido y se notaba que estaba de mal humor, últimamente estaba más irritante que nunca, la tensión, el miedo y sus propios fantasmas hacían que no fuera el mejor de los compañeros en los últimos días.
Fred y Gwen se miraron haciendo muecas y aspavientos intentando decidir si era el mejor momento para contarle lo de Spike. Toda la escena estaba siendo observaba por un desconcertado Gunn que se asombraba más cuanto más miraba a las chicas, su comportamiento era del todo extraño. Decidió que debía de tener una conversación seria con Fred. Las chicas decidieron en el último momento retrasar la conversación con Angel para un momento más propicio aunque sabían que ese momento nunca llegaría.
Gunn miraba a Fred haciendo gestos intentando que comprendiera lo que le pedía, quería que la chica saliera de la cocina y hablara con él, estaba dispuesto a llegar al fondo de todo aquel asunto. Viendo que la chica escondía su mirada bajo el tazón de cereales se acercó a ella totalmente decidido.
Gunn: Fred!!! le susurró al oído mientras miraba de reojo a Angel. Si algo había notado era que las chicas no querían que el vampiro se enterase de lo que se tenían entre manos- Salgamos un poco fuera, necesito hablar contigo, ya!!!
Fred lo miró con un gesto de nerviosismo a lo que él respondió con una amplia sonrisa que tranquilizó a la joven.
Fred: Bueno, ve a nuestro dormitorio y allí nos encontraremos dentro de unos minutos....
El chico asintió con la cabeza y salió de la cocina. A los pocos minutos Fred hizo lo propio. En la cocina quedaron Angel y Gwen. El vampiro no estaba precisamente muy hablador esa mañana así que Gwen se levantó para volver a su dormitorio. Cuando ya salía por el umbral de la puerta Angel la habló provocando un sobresalto en la joven;
Angel: Gwen, espera un poco!!!
La chica estaba nerviosa y asustada, ya me ha descubierto, pensó. Se acercó al vampiro con paso inseguro y se sentó a su lado. Él volteó su cabeza y la miró directamente a los ojos mientras la hablaba;
Angel: Te pasa algo?? Pareces estar en otro lugar, llevas un tiempo extraña y aunque...., sé que últimamente no he sido el mejor de los compañeros....., dormir tan poco no me hace mejorar apartó la mirada de la de la chica y la fijó en su tazón de sangre- sabes que si tienes algún problema puedes contar conmigo, lo sabes verdad?? de nuevo volvió su mirada a Gwen -
La chica sonreía aliviada, había estado demasiado cerca de ser descubierta. En ese momento sentía el impulso de contarle todo al joven que se sentaba frente a ella, que le ayudaba y cuidaba...., pero sabía que no era el mejor momento.
Gwen: Sí, lo sé Angel sonrió- No me pasa nada, es sólo que estoy un poco cansada, eso es todo....
Angel asintió con la cabeza y siguió con su desayuno. Parecía que la respuesta había colado después de todo. Gwen se levantó y se dispuso a salir mientras daba una palmada en la espalda del vampiro. Suspiró y comenzó a subir las escaleras.
Cuando estuvo arriba fue a otra habitación, entró y cogió unas medicinas para curar a Spike la quemadura de su mano. Comenzó a andar camino de su dormitorio.
Cuanto más se acercaba a su cuarto una opresión en su estómago iba creciendo hasta el punto de no dejarla respirar. No sabía lo que le ocurría pero estar al lado del vampiro, o incluso sólo pensar en él la ponía nerviosa y azorada.
Llegó a su habitación y entró sin mirar atrás, no se dio cuenta que Angel la observaba desde el pasillo. El joven había notado a la chica evasiva y nerviosa, sabía que algo la preocupaba así que había decidido ir a hablar más seriamente con ella, debía de confiar en él, era la única persona que tenía. Angel suspiró entristecido por la falta de comunicación entre ellos, últimamente había estado demasiado ocupado con sus asuntos, había dejado a los demás de lado y eso lo entristecía. Al tomar aire notó algo extraño en el ambiente, un olor diferente, un olor ajeno a sus amigos, un intruso. El vampiro tomó de nuevo aire intentando averiguar quién era la persona que estaba allí con ellos y dónde se escondía. Cerró los ojos y olisqueo de nuevo el aire, supo entonces que la persona extraña se escondía en la habitación de Gwen. Abrió sus ojos con el miedo dibujado en su rostro, siguió expectante continuando con su peculiar investigación.
Angel cerró de nuevo los ojos mientras intentaba discernir los olores que se mezclaban en el ambiente como un perfume flotando en el aire, era un olor diferente, un olor extraño pero a la vez conocido para él. Su mente comenzó a funcionar como si de un ordenador se tratara, comenzaba a analizar ese olor, a quién podía pertenecer? Pasó por humanos, después demonios y por último, ya sin esperanza de reconocerlo, terminó repasando los olores que recordaba de vampiros conocidos. Cuál fue su sorpresa cuando se dio cuenta de que el olor que tan extrañamente conocido le parecía pertenecía a su gran enemigo Spike!!!
La cara de Angel cambió radicalmente, su cara se transformó en la de vampiro y salió corriendo hacia la habitación de la chica. Aunque sabía que antes de morir Spike tenía alma, sabía por propia experiencia que cuando se vuelve de la muerte hay muchos cambios en uno mismo, cambios importantes que no deseas que pasen, cambios terribles que te vuelven a convertir en el monstruo que eras. Tenía que avisar a Gwen, tenía que ayudarla, no podía dejar que entrara en esa habitación con ese asesino, con ese monstruo esperándola. Mientras corría sacó una estaca de su bolsillo, siempre tenía a mano su arma.
Llegó rápidamente a la puerta y la intentó abrir, de un fuerte golpe la derribó y entró como un huracán. Sólo le dio tiempo a ver una cabellera rubia que estaba cerca de la chica, ella aun seguía viva, eso lo tranquilizó. Llegó a su lado y la lanzó hacia atrás tirándola en la otra cama. La chica estaba sorprendida y asustada, todo fue en décimas de segundo, todo fue demasiado rápido, ella no pudo hacer nada por detenerlo, no tuvo tiempo para ello. Angel se lanzó sobre Spike, lo tiró al suelo, y comenzó a golpearlo con violencia. El rubio vampiro no devolvía los golpes, estaba agarrotado por el miedo, la sorpresa y por la falta de entrenamiento, habían sido bastantes los meses que había permanecido en el lugar de donde vino. La cara del vampiro comenzaba a estar amoratada e hinchada mientras la chica se levantaba de la cama horrorizada viendo como Angel sacaba una estaca de su bolsillo. Spike lo miraba con ojos perdidos y tristes, también la miraba a ella sabiendo que lo que estaba a punto de pasar era ya inevitable y que eso era una despedida.
Gwen: Nooooo!!!!!!!!!
La chica se lanzó contra Angel intentando que parase de golpearlo y que tirara la estaca pero el vampiro ya no podía parar, estaba decidido. El miedo a que Spike hubiera perdido su alma unido al odio que siempre le había procesado hacían que sus manos no parasen de moverse contra el rubio vampiro. Gwen corría hacia él, Angel levantó la mano con la estaca y cuando estaba a punto de atravesar el corazón de Spike un fuerte dolor lo dejó sin fuerzas. De repente todo fue oscuridad.
La chica apartó a Angel de encima de Spike y lo dejó tendido sobre el suelo. Se acercó al rubio vampiro y se arrodilló a su lado. Él estaba descolocado, no entendía qué había pasado, quién era ese vampiro que lo había intentado matar, demasiadas dudas para una mente atormentada como la suya;
Gwen: Spike, estás bien???? en el tono de la chica se notaba la gran preocupación que sentía en esos momentos. Con la mano levantó levemente la cabeza del chico que empezaba a reaccionar. Su cara estaba amoratada e hinchada, la chica sentía un gran dolor por verlo de esa manera, se sentía culpable por no haber hablado con Angel de su existencia-
Spike movió ligeramente la cabeza afirmativamente mientras ella lo ayudaba a levantarse. Se sentó en la cama tocándose la cabeza en señal de dolor. Ella lo miraba apenada por el espectáculo que acababa de presenciar. Había tenido que dar una descarga a Angel para evitar que matara al vampiro y ahora tendría que explicar muchas cosas.
Angel se despertó en pocos minutos. Aun se encontraba aturdido y desconcertado, no entendía que demonios había pasado, no lo recordaba con claridad, todo había sido demasiado rápido. Se levantó mientras observaba atónito la escena que se desarrollaba dente de sus ojos. Gwen y Spike estaban dialogando tranquilamente, él totalmente perdido y ella con los ojos empapados en lágrimas. Cuando estaba ya en pie ella giró hacia él y le habló;
Gwen: Siento haberte hecho esto, Angel bajó la mirada para evitar la del vampiro que le suplicaba y exigía una respuesta- Tenía que evitar que hicieras daño a Spike, él...., no es malo, está perdido, desorientado, ayer....
Angel: Me estás diciendo que tú sabías que él se encontraba aquí??? la mirada de Angel expresaba la rabia contenida por no haber podido acabar con el vampiro- Y..., se puede saber si ocultas alguna cosa más???
Spike: Déjala en paz, ella no te ha hecho nada para que la hables así dijo mientras se levantaba de la cama y se aproximaba al vampiro-
Angel: Cállate Spike!! Si no quieres que te mate...
Spike se quedó petrificado, ese vampiro desconocido conocía su nombre, lo conocía a él y parecía no tenerle demasiado cariño. En su interior algo le decía que también lo conocía mientras miraba a la persona que estaba delante de él y que a punto había estado de matarlo. En su interior sabía que no eran precisamente amigos, el sentimiento se aproximaba más al odio, a la indiferencia.
Angel giró de nuevo hacia Gwen con la cara llena de enfado. De repente entraron a la habitación Fred y Gunn alertados por la algarabía y el griterío.
Fred: Gwen, Spike, ...., qué ha pasado??? Estáis bi.........- la cara de la chica se puso blanca al ver a Angel en la habitación- .....en?? Ho....hola Angel en sus labios dibujó una sonrisa de culpabilidad y asombro-
Angel: Bueno, bueno, osea que vosotros también conocíais la existencia de Spike...., bien, entonces he sido el último tonto en enterarme, no???
Gunn: Bueno, eso no es exactamente así, yo me acabo de enterar ahora mismo, justo Fred me estaba contando cuando....
Angel: Basta dijo mientras salía de la habitación- Hablaremos más tarde, ahora estoy demasiado enfadado para poder razonar, espero que más tarde me deis una explicación razonable si no queréis que os mate y me beba vuestra sangre, está lo suficientemente claro??
Dicho esto el vampiro salió de la habitación con cara de pocos amigos dejando a los cuatro pensativos y ligeramente asustados. No esperó respuesta alguna, ya tendrían tiempo de aclarar las cosas más tarde.
Fred: Bueno chicos, nosotros os dejamos, Gwen, sería mejor que curaras a Spike las heridas. Nos vamos, Gunn??
El chico afirmó con la cabeza y los dos salieron de la habitación y se dirigieron a la suya.
Gwen se acercó a Spike recogiendo las medicinas que habían caído al suelo durante la lucha. Cerró como pudo la puerta que había quedado destrozada después de que Angel entrara y volvió sobre sus pasos hacia el vampiro. Se sentó frente a él y comenzó a curar sus heridas, primero empezó con la quemadura de la mano, tenía fea pinta pero la naturaleza vampírica de Spike lo ayudaría a cicatrizar pronto. Él observaba como ella lo curaba, la suavidad con la que limpiaba su herida, la tranquilidad y el cuidado con la que le sujetaba su mano herida. Ella, ligeramente azorada y nerviosa no levantaba la mirada por miedo a cruzarse con la del vampiro.
Después siguió curando las heridas de la cara, ella miró fijamente el rostro amoratado del vampiro, una punzada de dolor la atravesó al ver lo que su mentira podía haber provocado. Los ojos se le volvieron a cubrir de lágrimas al pensar en el trágico final en que todo esto podría haber desembocado.
Spike: Tranquila Gwen, no pasa nada, todo salió bien la voz del chico era tranquilizadora- No debes culparte por nada el vampiro siempre había tenido una intuición muy desarrollada para averiguar y entender los pensamientos o sentimientos de la gente. Él sabía que la chica se sentía culpable por todo lo ocurrido y creía que era injusto que todo ese peso, que toda esa culpa recayese sobre sus hombros después de lo que había hecho por él- Si te estoy poniendo en un compromiso o te estoy metiendo en problemas....
La chica interrumpió al vampiro antes de que terminara la frase. Sabía que él iba a ofrecerse a marchar del Hotel para que ella no tuviera más problemas con ese tal Angel.
Gwen: No, ni siquiera lo pienses, ya me las arreglaré con Angel, le explicaré todo lo ocurrido y él lo entenderá ni ella misma cría que todo fuese a ser tan fácil pero tenía que tranquilizar al vampiro, no podía permitir que se fuera del Hotel, no aun-
La chica comenzó a curar las heridas de su cara, los dos se miraban como imnotizados, parecía que cuando se miraban se perdían en lo profundo de sus ojos, el uno en los del otro. Siguió curando el rostro del vampiro que de vez en cuando se contraía por el dolor. Ella dibujaba una mueca de disgusto cada vez que le hacía daño e intentaba hacerlo más suavemente, la mano le temblaba mientras limpiaba las heridas. Spike agarró su mano y la miró tiernamente a los ojos;
Spike: No tengas miedo de hacerme daño, has hecho mucho por mí y te lo agradezco con toda mi alma los dos se seguían mirando, parecía que el tiempo se había detenido para que ellos se observaran y se sintieran- Aun no te había agradecido todo lo que has hecho, te has puesto en peligro, lo siento....
La joven rozó los labios del vampiro con sus dedos haciéndole ver que no siguiera hablando. El contacto de su piel la puso nerviosa, algo que también apreció el vampiro que experimentó las mismas sensaciones.
Gwen: Bueno dijo quitando rápidamente los dedos de los labios del vampiro. Su rostro se había vuelto de un color rojo que se volvía más intenso cuanto más miraba al vampiro- Ya estás mejor dijo levantándose de la cama donde se encontraba sentada frente a Spike- dentro de poco tus heridas curarán, ahora debo irme- dijo atropelladamente. Estaba nerviosa por la situación, le venía grande todo aquello- Nos veremos después, Spike.
Spike: Sí, bien dijo mientras parecía despertar de un sueño precioso y que lo llevaba más allá del razonamiento- Supongo que tendremos mucho tiempo para hablar.
Gwen se giró antes de salir de la habitación.
Gwen: Sí, todo el tiempo del mundo.
Y con una sonrisa desapareció por el umbral cerrando la puerta tras de sí.
Capitulo 6